El amuleto de Samarkanda de Jonathan Stroud

Título: El amuleto de Samarkanda 

Autor: Jonathan Stroud

Editorial: Montena

Género: Fantasía

Londres, 2003. La magia rige la política y los negocios. por eso, cuanto más importante es un hechicero, más influencia y poder tiene. Desde pequeños, los futuros hechiceros son separados de sus familias, pierden su nombre y un mago se encarga de su estricta educación. A los doce años, reciben el nombre oficial, según el cual serán reconocidos como magos y como hombres, así como su primer par de lentes, que les permite ver algo del mundo de los demonios. El poder de los magos es ilimitado -en función de su saber- y la mayoría trabaja para el Gobierno. La corrupción está a la orden del día y la amistad es sólo cuestión de estrategia. Cuantos más poderes tiene un mago, más capacidad tiene de convocar a los distintos demonios y conseguir lo que quiere. Sin embargo, a los hechiceros les ha salido un incómodo enemigo: la Resistencia, un grupo de personas normales y corrientes que, hartos de la corrupción, quieren que el poder vuelva a manos del pueblo...

Nos encontramos a Nathaniel, un niño de 11 años que vive en Londres en casa de su maestro, el señor Underwood, un hechicero que trabaja para el Gobierno. Nathaniel es un chico listo y aprende enseguida, pero su maestro es un zoquete que no sabe ver la inteligencia de su pupilo, y este error se convierte en el argumento principal del libro: ¿Cómo hará Nathaniel para demostrarle, no sólo a su maestro sino a todos los altos hechiceros londinenses, su valía? Pues la respuesta es sencilla: LA VA A LIAR COMO SÓLO ÉL SABE. Al principio sólo es por demostrar su valentía, luego por venganza, el caso es que nuestro joven hechicero no se anda con rodeos y sin ningún permiso invoca a Bartimeo, un diablo menor al que le encanta el sarcasmo y meterse con todo el mundo. Bartimeo es el compañero de aventuras de Nat durante todo el libro, y saca a nuestro protagonista de más de un apuro.

A decir verdad, Bartimeo es lo mejor del libro. No es sólo que tiene unas contestaciones brillantes, si no que no ser corta un pelo a la hora de dar su opinión y la expresa siempre que puede a través de notas a pie de página (¡genialosas eh!).

Este libro de magia no es como los demás. En esta historia los hechiceros no tienen magia, tienen saber. Y es ese saber lo que los hace poderosos. Son poderosos porque conocen todos los hechizos, pociones y conjuros que necesitan para tratar con los diablillos sin que éstos se les pongan en contra. Los hechiceros les dan órdenes, y los diablos, utilizando su magia, las llevan a cabo. Si no las cumplen, los hechiceros tienen pleno poder para torturarlos de cualquier manera imaginable.

Una vuelta de tuerca a los relatos de magia ya tradicionales como Harry Potter. Una nueva perspectiva en la que los hechiceros no son los buenos, ni los diablos los malos siempre.

El amuleto de Samarkanda se lleva un 4'5/5, y próximamente tendréis la reseña de su segunda parte, EL Ojo del Golem.